En función de las expectativas de la hinchada, lo mostrado por Palestino el día jueves en estadio El Cobre de El Salvador se puede concluir que el equipo aún está en rodaje, dado el poco tiempo entre el término del campeonato anterior y la escasez de compromisos previos. No obstante, la incorporación de los nuevos refuerzos principalmente en defensa y ataque entrega buenos augurios de mejoramiento colectivo al corto plazo.
Partiendo por el arco, Toselli mostró sobriedad y tranquilidad bajo los tres palos; las escasas oportunidades de tiro al arco que tuvo Cobresal fueron controladas adecuadamente por el nuevo arquero árabe. Seguro tanto en los tiros de distancia como en el juego aéreo, el ex mundialista juvenil tiene la oportunidad de mostrar su juego, luego de estar permanente relegado bajo la sombra de Dituro en la Universidad Católica. En lo que respecta a Suárez, viene a reafirmar lo que demostró en Everton el campeonato pasado. Con voz de mando en la zaga, fue factor importante en el orden defensivo palestinista, con concentración permanente y buena colocación, permitió que los laterales Fernández y Mesina tuvieran salida y subida para aportar en aspectos ofensivos. Bruno Romo también aportó en la defensa, aunque se vio que necesita más partidos para afiatarse. Finalmente en delantera, Sanchez Sotelo se mostró como un factor de peligro sobretodo en el segundo tiempo, cuando virtualmente tuvo más libertad de movimiento por la inferioridad numérica del rival. En resumen, las incorporaciones de este Palestino 2021 cumplieron y prometen.
Respecto al funcionamiento colectivo, como titulamos este comentario, se observó que el equipo aún le falta ritmo de competición. Bryan Carrasco se mostró solamente el primer tiempo, desapareciendo en el segundo (lo reemplazó Ahumada). Para destacar por sobre el resto fue la presentación de César Cortés, factor fundamental en el movimiento pulcro del balón y de pases incisivos en ataque. Luis Jiménez tuvo que volver a retrasarse en ausencia de Villanueva, siendo anulado en gran parte del primer tiempo y encontrando espacios y aportes en el complemento; en sus pies estuvo la mas clara ocasión para vencer la portería de Requena. Quienes mostraron un buen entendimiento fue la dupla del costado izquierdo (Fernandez y Benítez). Si defensivamente hubo tranquilidad, el excesivo dominio del balón no influyó en un adecuado volumen ofensivo colectivo, el cual fue bastante pobre, con solo una llegada al arco en el primer tiempo y solo tres ocasiones claras de gol durante todo el partido. Es de esperar que, con el comienzo del campeonato, los músculos se aclimaten y el pensamiento colectivo fluya de mejor manera; hay que pensar que Villanueva tiene a lo menos 2 meses de para, por lo que hay que resolver el partido de vuelta con los elementos ya presentes.
Finalmente, la sensación que queda es que las expectativas eran superiores a lo mostrado en la realidad, lo cual pudo generar frustración en varios hinchas de Palestino. Pero a pesar de ese sentimiento inicial, queda la sensación de que este equipo puede mostrar mucho más de lo ya visto, de modo que no podemos al inicio ser pájaros de mal augurio ni tampoco conformistas a la primera; debemos apoyar al equipo como siempre se ha hecho con la esperanza de que se va mejorar partido tras partido.
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