Antes de entrar en materia, el minuto de silencio por las
victimas en Gaza viene a reafirmar que la existencia de palestino va más allá
del fútbol, es aunar un sentimiento de libertad a través de estos 4 colores y confirmar
que el olvido está muy lejos. Palestina está muy presente a pesar de la
distancia.
Yéndonos al partido, que podemos decir, pues más de lo
mismo. No ha sido sorpresa que palestino comienza de muy buena forma, atacando,
encerrando al rival y en muchas ocasiones da sus frutos de manera tempranera.
Como en el partido que hoy nos ocupa, Matías Campos López aprovecho la primera
ocasión a los 4 minutos. Sin embargo, luego de abrir la cuenta vino lo que
viene siendo una tónica en el plantel “baisano”: No amarrar los partidos. El
primer tiempo palestino tuvo chances de ponerse 2 a 0, pero no lo consiguió y
al termino de la primera etapa la sensación de intranquilidad paso a ser
justificada cuando comenzó la segunda etapa. Palestino retrocedió, permitió que
Antofagasta adelantara sus líneas y viniera lo de siempre un pase que encuentra
a palestino mal parado…empate.
En los minutos finales la ventaja pudo
obtenerla cualquiera de los equipos, aunque Palestino, esta vez, sí consideró el
ataque. Pero ya era muy tarde. Garcés se redimió de su complicidad en la
primera conquista, manteniendo a raya las arremetidas desesperadas de Campos y
compañía.
El empate de ayer no nos muestra nada nuevo en palestino,
esta vez no pondremos en duda las intenciones de Germán Cavalieri, creemos que
el busca llevar a Palestino al triunfo, pero lamentamos que sus decisiones,
planteamientos y filosofía lo alejan de su meta, ya no es casualidad que
encuentre ventaja tempranera y sea desperdiciada con el correr de los minutos,
no es casualidad que al rival le baste un pase en profundidad, una pelota
parada para resolver el enigma planteado por Cavalieri. El planteamiento de
palestino a veces asoma como un castillo de naipes, basta un solo chasquido
para derribar todo lo construido.
Sin ánimos de pedir cabezas, ni insultar, nos remitimos a
los hechos y la realidad es que German Cavalieri no está funcionando. Así de
simple.
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