Yasser Arafat es el padre de la causa Palestina, cuyo
liderazgo sigue siendo la sombra entre quienes creemos que los palestinos han
sido víctimas de opresión que no es comparable a ningún contexto social
moderno, blancos de guerra que no son alcanzados por una bala perdida sino que
por misiles y cientos de mutilados (en su mayor parte perdida de extremidades).
Han desarrollado su vida, cultura e identidad bajo ocupación. Los palestinos no
luchan por una “Palestina más justa”, luchan para que el hecho de ser
palestinos no sea un crimen, luchan porque sus muertos no sean olvidados,
luchan para seguir siendo palestinos y luchan para que los cerca de 10.000
palestinos asesinados (muchos menores de edad y mujeres) solamente desde el año
2000 hasta hoy, no sean en vano. Bajo este contexto de injusticia y barbarie
sin igual es que emerge la figura de Yasser Arafat que no solo se convirtió en
un símbolo de la causa sino también en un héroe palestino.
Arafat siempre hizo todo lo posible y siempre trató de
hacerlo en beneficio de Palestina. Hizo lo que otras personas solo podían
soñar, dirigió una verdadera empresa de libertad en medio de un clima de
desolación con el único propósito de que Palestina fuera un estado
independiente y soberano. Después de la guerra de los Seis Días de 1967, con
una Palestina bajo el control israelí
que no le ofreció una salida política digna, Arafat puso la causa palestina en
la agenda política internacional. Cuando los países árabes con líderes carismáticos
como Nasser y Sadat en Egipto, Assad en Siria y el propio Hussein en Iraq no se
pusieron de su lado, la Organización de Liberación De Palestina se levantó en armas y recurrió a
acciones desesperadas que fueron interpretadas como terrorismo estigmatizando a
la OLP y retratándola como un peligro para la estabilidad en la región y para
la seguridad de Israel, cuando la verdad de las cosas es que si incrustan una
colonia europea de religión judía que ocupó a la izquierda(lo detallaremos en
breve) europea era obvio que encontraría resistencia en una población que se
concibe así misma como palestina y ciudadanos de la misma. Para lograr tal
apoyo europeo fue una mezcla de situaciones porque primera y paradójicamente los judíos tuvieron que
abandonar su fe mesiánica para poder adoptar el sionismo. El sionismo no podía
surgir mientras esperaban la ayuda del cielo y aceptar dócilmente su destino
como minoría nacional y religiosa que vivía entre naciones mayoritarias.
Segundo las
condiciones para que surgiera el sionismo eran que los judíos se abrieran a los
procesos que estaban desenvolviéndose en la sociedad europea en general y se
liberaran de las limitaciones religiosas para ello usaron a la izquierda
europea como una especie de caballo de troya para sus reales intenciones
nacionalistas, puesto que la historia ha sido testigo de que el sionismo no
tuvo problemas en cambiarse de bando con tal de que su delirio de tierra
prometida siguiera en pie, por lo que su movimiento nunca ha sido genuinamente
de izquierda, ni hoy tampoco es de derecha, el sionismo simplemente adecua las
tendencias para su propia conveniencia con una doble moral que haría enrojecer
hasta al más sinvergüenza de los políticos nacionales de cualquier
tendencia.
La importancia de Yasser Arafat y lo que lo hace relevante
es que fue quien abrió las puertas dela
causa Palestina a ser reconocida como legítima, pero lo más importante
es que su lucha trajo consigo otro elemento en la concepción de lo que
significa ser palestino: identidad. Él ayudó a rescatar la identidad del ciudadano
palestino. Los palestinos experimentaron varios intentos de despojo de su identidad por los turcos, los británicos y
finalmente por los israelíes. Sin embargo Arafat tuvo la audacia suficiente de
volver a entregar esperanzas en los corazones palestinos que veían y aun ven
como un ente que se denomina estado bajo concepciones mesiánicas, plantea el
enfrentamiento desde una perspectiva de aniquilación de lo que ellos consideran
una amenaza. Bajo este contexto es que
la importancia de Yasser Arafat subyace en que entrego algo por lo que luchar y
creer en medio de un escenario adverso, en algo tan simple como su derecho a
vivir como palestinos en Palestina.
Para cimentar la causa Palestina Yasser Arafat se valió de
las siguientes 5 acciones:
-En 1953 fundó su propia organización, la Unión General de
Estudiantes Palestinos (UGEP).
- el 21 de marzo de 1968, en la que aquel, al frente de 300
fedayines y con la oportuna ayuda de la artillería jordana (que impidió la
aniquilación cierta de la columna palestina), resistió el ataque de una
división blindada y la aviación israelíes.
-Proponer un estado palestino laico y democrático. Punto a
considerar ya que el sionismo siempre ha querido hacer creer que la lucha
Palestina es algo “religioso”, lo cual es irónico ya que la auto denominación
de “pueblo elegido” es por parte de
ellos, entonces queda la pregunta ¿quién es el fanático religioso el que se
presenta como hijo de dios o el que solo lucha por ser hijo de ESA tierra? La
respuesta está en el sentido común.
-Éxitos diplomáticos como que el 14 de octubre de 1974 la
Asamblea General de la ONU reunida en su XXIX sesión aprobó la resolución 3210,
por la que reconocía a la OLP como representante legítima del pueblo palestino
y le invitaba a participar en las deliberaciones sobre aquel punto.
- El 22 de noviembre de 1974, mediante las resoluciones 3236
y 3237, la Asamblea respectivamente reconoció los derechos del pueblo palestino
a la autodeterminación, a la independencia y la soberanía nacionales, y al
retorno de su población refugiada, y admitió a la OLP con el estatus de
observador permanente.
Yasser Arafat también logró un acuerdo en 1994 en Oslo junto
a Isaac Rabin por entonces primer Ministro de Israel por lo que le fue
concedido el premio nobel de la paz. Hay que precisar que en los acuerdos de
Oslo Arafat fue inocente y estuvo en una maratón de reuniones, lo que le valió
criticas de sectores palestinos, pues se consideró que fue muy ingenuo y cedió
muchos derechos de los territorios palestinos que no tendrían beneficios a
largo plazo, sin embargo la situación en Palestina tampoco permitía un margen
de concesiones ya que Israel cuando cree que su soberanía está comprometida
lanza ataques belicos que dejan cientos de muertos por lo que la presión que
tenía Yasser Arafat era en base de no acrecentar el número de muertos en
territorio palestino.
Los acuerdos ponían cinco años para negociar un acuerdo
permanente, y durante ese período, el gobierno israelí se mantendría como el
único responsable de los asuntos exteriores, la defensa nacional y las
fronteras. En este sentido, Israel seguirá siendo responsable de la seguridad
en las fronteras internacionales y los puntos de cruce con Egipto y Jordania.
Israel también conservaría la responsabilidad de la seguridad de los israelíes
en Cisjordania y la Franja de Gaza, los asentamientos israelíes en esas zonas,
y la libertad de movimiento en las carreteras, además también los asuntos de
los refugiados palestinos, jerusalén, las fronteras y ciertos territorios que
iban a ir siendo traspasados al control de la autoridad nacional Palestina a
medida que iban avanzando, sin embargo estos acuerdos nunca llegaron a
concretarse a pesar de que Palestina cedía bastante ya que para el sionismo más
extremista Rabin era una amenaza siendo baleado en el pecho y el abdomen por
Yigal Amir, un estudiante de derecho del centro religioso de altos estudios, la
universidad Bar Ilán. Amir era un joven de 25 años, un colono que tenía en su
vida el horizonte de seguir expropiando tierras a los palestinos, poniendo en
pie cada vez más colonias (hoy denominadas territorios ocupados). Este
acontecimiento dejo en claro que las intenciones de gran parte de los israelíes
no es la paz, es la aniquilación total de lo que ellos consideran “el invasor”
de su tierra prometida. La consecuencia de la postergación del cronograma fue
el estallido de la intifada en el año 2000 y un recrudecimiento por parte de
las respuestas bélicas de Israel hacia la población Palestina que se ha
mantenido hasta hoy.
Yasser Arafat fallecería en sospechosas circunstancias el 11
de Noviembre de 2004 y su muerte dejo un vacío que aún no se ha podido llenar,
pero la grandeza de sus actos lo mantiene como un ejemplo a seguir y no
claudicar por la independencia Palestina.
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