Mojito R. Corgan entra como siempre puntual a las 5 de la tarde al Judo’s bar. Sofocado por el calor que le daba su gabardina, esboza una leve sonrisa al ver que su asiento favorito está desocupado. Como es tradición, saluda a Willie, el barman y le entrega su maletín de trabajo a cambio de su infaltable Martini seco. Sin perder tiempo, se une a la conversación de los tradicionales comensales del viernes que sagradamente se reúnen los viernes a cerrar la semana laboral.
"¿Sabías que la sandía es rica en vitamina C y otros oxidantes? Si comes sandía ayuda a combatir la formación de radicales libres asociados al cáncer” comentaba Manuel R, mientras se tragaba la última aceituna que quedaba en su pocillo.
Mojito sonrió́ con su característica calma, girando lentamente su copa en la mano.
—La sandía no solo es saludable, tambien es un símbolo. Hace poco leí́ que en algunos lugares se convirtió́ en una forma de resistencia. Algo tan simple como una fruta puede cargar un significado enorme, aunque a veces quienes la miran no lo entiendan.
Manuel arqueó una ceja, pero antes de preguntar a qué se refería, Mojito tomó un sorbo de su Martini y prosiguió́:
“Eso me recuerda a una anécdota que pasó en Luanda. Estaba saliendo de una reunión de cierre de venta de diamantes, cuando cruzando la calle veo a una de las mujeres más bellas que he visto en mi paso por Angola. Disimuladamente cuando pasa por mi lado saco de mi bolsillo un billete de 100 kuanzas y lo dejo caer en el pavimento. Haciendo el ademán de recogerlo, le digo a la chica ‘disculpa, creo que se te cayó un billete de tu cartera’. Ella se da vuelta haciendo flamear su negra cabellera y, delicadamente, se devuelve hacia mí, toma el billete y flecha su mirada directamente a mis ojos. Junto con darme las gracias, se acerca a mi oído y me dice algo que nunca se me borró de mi mente: ‘a las 20 menos quince en el hotel Skyna, bar central’. Corrí al hotel donde me alojaba, me puse mi mejor traje y me envolví en mi mejor perfume, partiendo raudo hacia el hotel de encuentro. Cuando llegué 5 minutos antes de lo pactado, la esperé como me dijo en el bar con un Martini seco. No estaba ansioso, sabiendo que las mujeres se toman su tiempo para llegar, pero a medida que pasaba el tiempo su silueta no atravesaba la puerta principal. Esperé hasta las 10:30 de la noche. Nada. Ni una nota, ni una explicación, ni una despedida”.
Mojo tomó nuevamente un tranquilo sorbo de su Martini. Hubo unos eternos segundos de silencio en la barra hasta que Mariano rompió la tensión de tan aleatoria historia.
“Don Mojo,
¿y que tiene que ver eso con las sandías?”
“¿Acaso no
lo ven? Sus pequeñas mentes no alcanzan a comprender el fondo del asunto.
Quizás la próxima semana les pueda aclarar cómo esta historia se enlaza con las
sandías” concluyó Mojito R. Corgan terminando su Martini seco, dejando 10 mil
pesos en la barra, tomando su maletín y dirigiéndose a la puerta para ir a plaza
Chacabuco”.
Luego del
buen debut ante Cobresal, Palestino se presentó este viernes en Santa Laura
para dar una fiesta en una nueva versión del clásico de colonias frente a la
Unión Española. Con un estado del campo vergonzoso, el local quería sanar sus
heridas por partida doble: primero para poder obtener su primer triunfo en el
campeonato y segundo para reivindicarse de la derrota ante el mismo Palestino
por copa Chile.
Pero
Palestino no quería perder la buena performance mostrada en el lance anterior,
sobretodo por las declaraciones durante la semana que sin duda subieron la
moral del equipo, dichas por Arturo Vidal y catalogando al club Tetracolor como
el cuarto grande del país. Declaración que rompió los papiros de historia y que
reconoce el indiscutible peso de los hechos en los último años, teniendo a
Palestino como habitual en los puestos de avanzada y en las copas internacionales.
Y luego de
todo lo vivido, la parcialidad árabe salió del estadio con una imagen
imborrable. La cara llena de alegría, la mente dando vueltas sin parar, una
locura que no termina nunca, un reencuentro consigo mismo con sabor a miel. Si
fuera por Joe, el partido hubiese durado un año y el no se cansaría de
derrochar magia, talento y goles. La espera de 7 días para dejar en 90 minutos el
mundo terrenal y buscar una sonrisa en un amague mágico, en una danza de pases
y en una red inflada por el balón es suficiente para un hincha que sufre acá y
en la distancia.
Palestino a
lo largo de los 90 minutos fue el dominador del partido, de eso no cabe duda,
pero los últimos 10” simplemente fue demoledor. Una Unión española con más
ganas que ideas trataba de batir el arco de Zanahoria sin éxito, y en su afán
descuidó de sobremanera su retaguardia. Pérez con visión de campo mandó un pase
certero a Tapia, el cual aprovechó muy bien y si bien podía encarar
directamente el arco hispano, levantó la cabeza, despachó un pase magistral a
sus dos compañeros libres al centro del área. Joe en su cabecita loca no se le
ocurre nada mejor que dejar babeando a Torgnascioli con un globo y con el arco
a merced pone la guinda de la torta a una jugada de equipo rápida y letal. Tal
vez el segundo gol resume claramente la actuación global de Palestino este
viernes en el potrero de Chacabuco.
Abrigo por
fin demostró todo su talento este año no solo con tres goles, sino que con una buena
comunicación fluida con el mediocampo Fernandez – Parra y las puntas de ataque
Carrasco y Tapia. La Unión cometió el gran error de darle espacios, y Joe no
los desaprovechó. Merecidamente se merece todas las luces en esta segunda fecha
del campeonato.
En línea con
el jugador del partido, todo el plantel hizo una gran presentación, desde el
arquero Pérez hasta la delantera iniciada por Arias. Queremos destacar dentro
del plantel a Gonzalo Tapia, incisivo y peligroso del minuto 0 al 90; Bryan
Carrasco reafirma su chapa de capitán; Dilan Zúñiga jugó un muy buen partido y
Sebastián Pérez fue garantía de seguridad en el arco. El mérito del equipo fue
no haber bajado su intensidad y concentración durante todo el partido, quedando
en la retina que partido a partido el equipo está mostrando una fisonomía de
juego, independiente del resultado, y eso lo agradece el hincha.
El próximo
partido es el otro clásico de colonias: Audax Italiano, quien viene jugando muy
bien tanto en copa Chile como en el Campeonato. Será la primera gran prueba
para el conjunto Baisano frente a un equipo que le va a dar pelea y frente al
cual Palestino querrá vengar la derrota al inicio del año.