Algo más que una conmemoración

                                            

30 de marzo se conmemora el día de la tierra Palestina, el Día de la Tierra, en recuerdo de un día de 1976 cuando las fuerzas militares israelíes dispararon y mataron a seis jóvenes ciudadanos palestinos de Israel, que se encontraban entre miles protestaban contra la expropiación del gobierno israelí de tierras palestinas.

El día de la tierra Palestina encierra algo mucho mayor que solo una conmemoración, pues si nos ponemos a analizar que cada una de las conmemoraciones palestinas están ligadas a una tragedia y además reafirma la condición enfermiza del estado israelí, también es una muestra de dignidad, de enfrentar la adversidad, de resiliencia. Es por ello por lo que hoy vamos a realzar la capacidad de Palestina a adaptarse, tomando para ello distintos ejemplos de como han afrontado la ocupación, la vejación de su identidad y ser culpables de solo ser palestinos.

Palestina como resiliencia cultural.

Desde la creación del estado de Israel, Palestina parece estar condenada, sin embargo, han dado muestras que por mucho que los pisoteen, la identidad palestina está muy lejos de morir. Una muestra de aquello es el Palestino de Chile, institución que encierra algo más que fútbol ya que cada semana la bandera Palestina es mostrada al mundo y los 4 colores que adornan su camiseta viene a reafirmar que el exilio no fue suficiente para ahogar los deseos de reivindicación de un pueblo que clama justicia.

Ampliando el concepto, hoy en día ser Palestino representa un “problema”, cargar con el estigma de ser “terroristas” lleva a que en muchos lugares la condición de ser palestinos sea sospechosa, paradójicamente todos estos puntos en contra entrega una fuerte reafirmación de identidad y jamás esconder lo que son, prosperando en cada lugar donde se asientan y nunca olvidando quienes son. Mostrando que su capacidad de adaptación es alimentada por su deseo de dar a conocer que es Palestina, quienes son los palestinos.

Los palestinos han logrado engañar al olvido, han afrontado que el destino les dio la desolación como herencia, saben lo que quieren y saben que nadie les quitará su identidad…sus ganas de vivir, ni su país Palestina.