Recuerdos de un Crack: Rodolfo Dubó

Por: José Nabzo

Introducción

Es imposible hablar de la década de 1970 sin la época dorada de Palestino, y no pensar en sus grandes figuras. Los primeros en venir a la cabeza son generalmente Oscar Fabbiani y Elías Figueroa, pero quien no se quedaba atrás, en un equipo lleno de figuras (lo cual hace más difícil y al mismo tiempo más fácil destacar individualmente) era el gran Rodolfo Dubó. Quienes lo vieron jugar, no dudan en llenarlo de flores y continúan con su afán de halagar a un jugador que es de la casa.

Recogiendo el testimonio de mi padre, El me cuenta que “era un mediocampista fenomenal, inteligente y dotado con una técnica exquisita y privilegiada”, una descripción que no deja nada a la imaginación. Luego agrega: “Rodolfo, vendría siendo lo que fue Leonardo Valencia en la temporada 2014-15, obviamente guardando las proporciones, ya que a pesar de no ser ni los goleadores, ni pilares defensivos, destacaban por su habilidad con el balón, y le daban alma al equipo. Ambos fueron capitanes en sus épocas, lo cual los hace más grande”. 

Trayectoria

Para comenzar, debemos ambientarnos, y saber de que tipo de crack estamos hablando.No es cualquier jugador, y a una persona tan identificada con nuestros colores, siempre se le debe respeto. Importante saber que: Rodolfo nació en Punitaqui, el 11 de septiembre de 1953 (año en que Palestino ascendiera por primera vez a la división de honor), por lo que ahora tiene 62 años. Mide 1,78 mts.

Es chileno y jugó en 4 clubes: comenzó su carrera debutando en 1974 con Deportes Ovalle. Su calidad llamó la atención en la capital y Palestino lo fichó en 1975, en lo que vendría a ser el peak de su carrera, siendo una de las figuras hasta el año 1982. En este período con Palestino, ganó 2 copas chile (1975 y 1977), el torneo nacional (1978) y llegó a la semifinal de una Copa Libertadores (1979), todo un récord para un equipo como el “Tino-Tino”. Posterior a su excelentísima campaña con el Tino-Tino, y a la severa crisis económica por la cual pasaba el club, no quedó otra opción a la dirigencia que vender a Dubó, el cual llega el año 1983 a la Universidad de Chile. Esto fue un tanque de oxígeno para las finanzas árabes. El año 1984 finaliza su paso por la “U”, volviendo así al club que lo vio surgir: Palestino. Su segundo paso por el Tino, fue más discreto, estuvo de 1985 a 1988, y siguió deslumbrando a la gente con su calidad y técnica, pero la edad ya le jugaba en contra y el equipo no era lo mismo, pero la magia no se había perdido. Finalmente Dubó se retira en 1989 en el club deportivo Lozapenco, de la Octava Región. 

Cabe destacar que Rodolfo jugó en la selección nacional, representó a Chile en 46 ocasiones, marcando 3 goles, entre los años 1977 y 1985. Incluso jugó el mundial de España 82, en donde ya sabemos, Chile pasó con más pena que gloria.