Existen tantas cosas que rodean la previa del partido de vuelta entre Libertad y Palestino, como la eliminación temprana de los otros tres clubes chilenos, uno de ellos rayó en la vergüenza, como fue la eliminación de unos seres fríos como el hielo que cayeron ante un humilde equipo boliviano, quienes el campeonato pasado apenas se salvaron del descenso y su portero las oficio de entrenador las ultimas 4 fechas. También el ninguneo de la prensa que daba al tino por muerto antes de iniciar el encuentro, para ellos un recado: nosotros no tenemos una hinchada numerosa, pero cargamos con la ilusión de todo un pueblo y por supuesto cargábamos la pesada mochila de dejar el nombre de Chile bien puesto en el certamen internacional. Así como también aquellos hinchas que le dan al Nico Córdova el mote de “ratón”, nada más ajeno a la realidad, lo ocurrido la noche del 19 Agosto en Paraguay no es una casualidad, el partido fue planteado de manera muy inteligente acorde a nuestra realidad: contamos con un excelente equipo titular, pero carecemos de variantes, por lo que el orden táctico cobra mayor relevancia por sobre un ataque vertiginoso al que algunos se acostumbraron e hicieron devotos como si el fútbol no tuviera matices.
Lo expresado anteriormente se ratifica en que en todo el partido Palestino mantuvo un orden defensivo comandado por Ezequiel Luna y su escudero Benjamín Vidal, más el apoyo de los laterales Carvajal y Sierralta, este último una inclusión muy inteligente. Ganó todos los cabezazos al área y aprovecho su altura de muy buena manera, en el medio campo Farías ratificaba él porque es nuestro motor, incansable en la marca, buena distribución de la pelota. Al medio Mazurek sigue demostrando sus pergaminos, criterioso en la entrega del balón y habilidad cuando es necesario.
Leo Valencia es el distinto, Leo puede estar apagado en parte del partido pero basta con que se inspiré una o dos veces y cambia el partido, contra Libertad no fue la excepción, pelota que paso en sus pies creaba peligro. Diego Torres de a poco está explotando, excelente jugador rápido por la banda aportando tanto en defensa como en ataque, Leandro Benegas demostró que está al servicio del equipo, metió y defendió, se sacrificó por la meta del equipo antes que buscar la gloria personal. Darío Melo simplemente soberbio, saco dos pelotas de gol de excelente forma y contuvo un remate que si bien no era muy peligroso por la fuerza, si complicado pues el balón dio un bote antes, pero Melo lo conjuró de excelente forma evitando el rebote, sin embargo su principal falencia está en la de salir a cortar, si trabaja este factor, podemos decir sin miedo que sería un portero de selección.
Si bien es cierto decimos que se mantuvo un orden defensivo, también es cierto que no renunció a atacar, conjugando un perfecto equilibrio entre defensa y ataque, prueba de aquello es que en el primer tiempo Palestino tuvo chances claras de anotar como el remate de Sierralata que se fue por poco desviado o el remate de Luna que sacaron de la línea, más algunos remates de Valencia, uno de ellos bien conjurado por el golero Muñoz, por contraparte en los últimos 15 minutos del primer lapso, Libertad se fue al ataque y fue en este periodo de tiempo en que Palestino mostró su mejor versión defensiva, con orden repelió todos los ataques paraguayos y pasó de buena forma la tormenta a la que fue sometida.
En el segundo tiempo hubo una acción que cambió el rumbo del encuentro, si bien era un encuentro parejo, el que nos encontráramos con un gol al inicio del segundo tiempo producto de un centro de Mazurek que dio en el pecho del central paraguayo Angel Martinez descolocando por completo a su portero y sellando el 1 a 0 para los “árabes”. De ahí en adelante Libertad se fue en busca del empate con más ímpetu que futbol , tuvo una chance de empatar el cotejo, pero Darío Melo estuvo notable para despejar de la línea lo que parecía un gol seguro.
Por nuestra parte Palestino cuando tenía el balón lo administraba de manera tranquila, destacando la rotación de balón y esperando encontrar el espacio necesario para asegurar el encuentro. Cosa que ocurrió con una movida desde la banca, a los 74 Franco Mazurek visiblemente agotado cede su lugar para Mathías Vidangossy y su ingreso resultaría clave, en la segunda pelota que tocaba se las ingenió para eludir a la defensa y ser derribado en el área, claro penal y para cobrarlo quien otro que Leo Valencia. Se paró frente al balón y con clase la puso en un rincón. 2 a 0 y con eso ya la llave quedaba sentenciada. El 3 a 0 llegó de otra contra liderada por el Leo que fue definida de excelente forma por Diego Torres. Sin embargo antes de que terminará el partido(antes entró Jason Silva por Valencia) ocurrió el ingreso de Shadi Shaban, quien jugó los últimos minutos y su ingreso fue celebrado como un gol por todos nosotros ya que ratifica que la hermandad entre Palestino y Palestina está más fuerte que nunca.
Desde esta tribuna te decimos Shadi que tu rezo en la mitad del campo simboliza la esperanza de todo un pueblo y que como siempre decimos estaremos lejos de nuestra patria ancestral…pero también estamos lejos de olvidarla.
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